sábado, 12 de diciembre de 2009

Tremenda inspiración del amigo José Laurencio….


Blog de La Plaza campo Elías.-
Diciembre 12, 2009.-
Por: José Laurencio Silva

Que significa para mi "La Campo Elías" guao  !! Muchísimas cosas. Primero que todo se me dibuja una sonrisa, sonrisa que se mezcla con nostalgia. Pero al final de mis recuerdos la sonrisa prevalece.

Me gustaría escribir con algún orden cronológico, pero no lo voy a hacer. Voy a escribir lo que se me venga a la... mente, así de simple. Por ejemplo en este momento estoy viendo a Richard Uribe + leyendo sus comics de Archie, coloco "comics" porque él los leía en ingles, ya que se estaba preparando para irse a Londres a estudiar, cosa que logro. Pues sí, muchos trazaron sus metas y sueños en La Campo Elías.

También veo por supuesto a las monjas de la Inmaculada, sus mangos, la capilla, la piscina (siempre vacía), las rejas que saltábamos para "robarnos los mangos" pues éramos chicos malos. De la Inmaculada recuerdo muchísimas cosas más, pero voy a nombrar una que a pesar de ser bien simple, la recuerdo mucho. Ador...aba los pancitos estilo francés con mayonesa que vendían en la cantina. Yo se que debería hablar de los compañeros de clase, de la primera comunión, de los actos culturales, pero eso es lo bueno de las memorias de La Campo Elías, son impredecibles

retro Pictures, Images and PhotosY quién no recuerda algunas de las familias que vivían alrededor de la plaza, los Domínguez, los Carabaño, los Salinas, los Bartolait entre otros. Familias queridas de siempre y por siempre. Coño (perdón la grosería) y los Gil qué? por favor discúlpenme cualquier omisión.


Quisiera hablar de tantas cosas que las ideas se me vuelven una estopa. Cuando jugábamos hoyito, cero ocho por cero, tonga, fusilado, stop, entre otros juegos. Cuando atravesábamos la avenida Loreto por debajo, así es POR DEBAJO, que se los cuente Pelón...
Los sándwiches de Pelón, esos eran peligrosos, muy peligrosos. La... música, lo último en música llegaba a la plaza. No existía internet pero como lo hacíamos? no lo sé! Pero lo último se escuchaba en la Campo Elías y si de moda se trata, no joda (por favor permítanme otra mala palabra) la moda se imponía allí. Botas anchas, bacterias, míster solos, botas de blue jean, saint tropez, camisas y pantalones de pana, sandalias hindúes, camisas de pepitas, de cuello Mao, cuello tortugas, tubitos, suecos, keds, kickers, chemises (puras originales), pingüinitos, Fred Perries, etc.


Pero lo más importante "Amistad" si señor amistad verdadera era lo que había en la plaza. Muchísimas veces también solo nos sentábamos en el muro por horas y hablamos, reíamos; que felices éramos!!! La plaza era tan especial, que así de buenas a primeras no recuerdo haber visto a nadie peleando. Lo que sí recuerdo es haber visto a gente RIENDO, si señor muchísimas carcajadas. La Campo Elías era en La Victoria como esos mapas que hay en los Centro Comerciales que dicen "Usted esta Aquí" porque desde la Plaza se domina todo el pueblo y ahora es todo lo contrario. "Usted esta aquí" es en muchas partes del planeta, como por ejemplo Calgary donde está el padre de esta criatura y todos vamos con nuestros lindos recuerdos derechitos a La Campo Elías, bueno así lo veo yo.


En fin, el Blog de La Campo Elías representa para muchos de nosotros un poco de nuestra esencia, nuestro pueblo querido, nuestros amigos del alma, nuestros recuerdos, amistad, amor, hermandad, Venezuela y todo lo lindo y bueno que hay en nuestras vidas. Podría pasar horas y horas escribiendo sobre mis memorias y... de lo que representa para mí La Campo Elías así que les digo queridos amigos y queridas amigas esto no será lo último que leerán de mi, por los momentos me despido, pero antes les digo cuídense mucho donde quieran que estén. Vayan para todos ustedes coterráneos todo mi amor y mis bendiciones. Su amigo de siempre y por siempre.

José Laurencio.

P.D. Ah !!! Leonardo Carabaño siempre me decía que el busto de Campo Elías era igualito a mi papa.


1 comentarios:

Unknown dijo...

Excelente escrito José L. Recordé, entre otras cosas, la tortura que significaba para Héctor "balbino" González caminar con aquellas botas de plataforma y que disimulaba con esmero al pasar frente a la Inmaculada.

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